¿Por qué Evo se va y Piñera se queda?
En un artículo anterior en este blog argumenté que la inestabilidad política en América Latina podría favorecer a actores de izquierda, especialmente en las próximas elecciones del 2021 en Ecuador y Chile. Unos días después, Latinoamérica se ve nuevamente en las portadas alrededor del mundo luego de la renuncia de Evo Morales a la presidencia en Bolivia. Este hecho representa un reto interesante para los especialistas en política comparada. ¿Por qué Evo Morales no sobrevivió a la ola de protestas en su contra pero Sebastián Piñera sí? ¿Qué hay de diferente en los dos casos? A continuación planteo cuatro posibles explicaciones para iniciar la conversación.
Latinoamérica se ve nuevamente en las portadas alrededor del mundo luego de la renuncia de Evo Morales a la presidencia en Bolivia. Este hecho representa un reto interesante para los especialistas en política comparada.
El motivo de las protestas. En Chile las manifestaciones iniciaron con motivo del alza al precio del transporte público. A esto se ha sumado la demanda del aumento del salario mínimo y el ataque a la desigualdad. Aunque se han mencionado temas políticos como la posibilidad de una Asamblea Nacional Constituyente, la inestabilidad en Chile está asociada a la insatisfacción económica. Los chilenos han aumentado sus expectativas como producto de la mejora en el estándar de vida de dicho país en las últimas décadas. Por su parte, en el caso de Bolivia, las manifestaciones tienen un motivo político y específico: el fraude que Evo Morales habría cometido en las últimas elecciones. Esto se sumó al descontento por el irrespeto a los resultados de un plebiscito en el que la ciudadanía había denegado a Morales la posibilidad de competir nuevamente por la presidencia. Dado que la ira ciudadana se dirige hacia el Ejecutivo, la solicitud de renuncia del presidente ha sido más fuerte en Bolivia.
Aunque se han mencionado temas políticos como la posibilidad de una Asamblea Nacional Constituyente, la inestabilidad en Chile está asociada a la insatisfacción económica.
El papel de la comunidad internacional. En Chile, la comunidad internacional se ha enfocado en garantizar el respeto a los derechos humanos. Debido a un uso limitado de la fuerza, el gobierno de Piñera no ha perdido su legitimidad internacional hasta el momento. En Bolivia, la Organización de Estados Americanos evidenció las irregularidades en el proceso electoral y solicitó la repetición de las elecciones. Esto disminuyó la legitimidad de Morales a nivel internacional. Ciertamente, Morales ha recibido apoyo de gobiernos de izquierda, sin embargo, varios de ellos son de corte autoritario como Cuba, Nicaragua y Venezuela. Esto podría resultar contraproducente en términos de legitimidad democrática.
Morales ha recibido apoyo de gobiernos de izquierda, sin embargo, varios de ellos son de corte autoritario como Cuba, Nicaragua y Venezuela. Esto podría resultar contraproducente en términos de legitimidad democrática.
La cultura política y el respeto a las instituciones. Existen enormes diferencias en términos de cultura política en ambos países. En el caso de Bolivia, su historia se ha caracterizado por altos niveles de inestabilidad. Sin partidos políticos ni instituciones fuertes, Evo Morales construyó un proyecto altamente personalista, similar en muchos sentidos al modelo venezolano. En el caso de Chile, el sistema político se ha caracterizado por la fortaleza de sus partidos políticos, la continuidad en las políticas públicas y la capacidad de los actores políticos de llegar a acuerdos. Aunque las manifestaciones han sido violentas en ambos países, el sistema chileno probablemente tiene mejores mecanismos de canalización del conflicto.
Aunque las manifestaciones han sido violentas en ambos países, el sistema chileno probablemente tiene mejores mecanismos de canalización del conflicto.
El apoyo de las fuerzas armadas. En Chile, Piñera ha mantenido el apoyo de las fuerzas armadas y la policía. Además, estos actores se caracterizan por un alto grado de profesionalismo y capacidad técnica, por lo que el uso de la fuerza no ha generado rechazo o retiro de apoyo al gobierno de Piñera. En el caso de Bolivia, Evo Morales se vio debilitado luego de los motines en su contra de miembros de la policía. Además, el ejército boliviano le recomendó presentar su renuncia. Esta podría ser la variable principal para explicar las diferencias entre los dos casos. Al no contar con un aparato represivo —al estilo de Maduro en Venezuela—, la posición de Morales era insostenible. Una vez más, la capacidad de represión del Estado parece ser un factor determinante en el derrocamiento o sobrevivencia de los gobiernos.
Una vez más, la capacidad de represión del Estado parece ser un factor determinante en el derrocamiento o sobrevivencia de los gobiernos.
En resumen, hay al menos cuatro factores que podrían explicar por qué Evo se va y Piñera se queda. Posiblemente el factor más importante reside en el apoyo de las fuerzas armadas. Esto podría ser alentador para los simpatizantes del gobierno de Piñera, pero también genera pocas esperanzas en sistemas como Cuba, Venezuela y Nicaragua donde la libertad de los ciudadanos se ve limitada por gobiernos opresores.
AVISO IMPORTANTE: El análisis contenido en este artículo es obra exclusiva de su autor. Las aseveraciones realizadas no son necesariamente compartidas ni son la postura oficial de la UFM.