Jonatán Lemus / / 22 de agosto del 2019

Las juntas de gobierno, un reto para el public choice

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Public choice parte de algunos supuestos básicos sobre el comportamiento del individuo en el ámbito político. Uno de estos es que el individuo busca maximizar su beneficio y reducir sus costos, así como lo haría en cualquier actividad privada. La búsqueda de dicha utilidad induce al intercambio con otros en el ámbito político. La inevitabilidad del intercambio y la búsqueda de renta, dejado fuera por la mayoría de marcos teóricos, son los grandes aportes de public choice a la ciencia política. ¿Aplica este marco conceptual a las juntas de gobierno? Esta es la pregunta que me surgió luego de leer el libro Triunviratos: la controversial historia de las juntas de gobierno desde la caída de Jorge Ubico hasta nuestros días, escrito por Roberto Ardón y publicado recientemente. 

La inevitabilidad del intercambio y la búsqueda de renta, dejado fuera por la mayoría de marcos teóricos, son los grandes aportes de public choice a la ciencia política.

En ese sentido, el estudio histórico de las juntas de gobierno presenta evidencia en apoyo a los supuestos de la teoría, pero también algunos retos importantes. Para empezar, se observa que, efectivamente, los individuos tienen intereses que buscan promover en el ámbito político. Por ejemplo, la junta de gobierno posterior a la revolución del 44 tomó decisiones en función de promover sus intereses: insertar los «principios revolucionarios» en una nueva constitución, crear una vicepresidencia ad hoc y favorecer la candidatura de Juan José Arévalo (pp. 96-97). Asimismo, Ardón también coincide con los supuestos del public choice al mostrar que las juntas de gobierno son raras en la historia, pues la división del poder entre varios actores usualmente genera una pugna interna. En efecto, la mayoría de juntas se disolvían o eran dominadas por uno de los actores. 

Ardón también coincide con los supuestos del public choice al mostrar que las juntas de gobierno son raras en la historia, pues la división del poder entre varios actores usualmente genera una pugna interna.

Finalmente, el libro también muestra un episodio en el que se observa el principio de la política como intercambio. Ardón relata la negociación sucedida luego de la renuncia de Arbenz en 1954. En dicha negociación, Carlos Castillo Armas y Élfego Monzón negociaban sobre el diseño de una junta de gobierno. Con la mediación estadounidense, ambos actores lograron un acuerdo en el que Castillo Armas aceptó ser parte de una junta de cinco, donde él quedaba en minoría temporalmente, para luego, unas semanas después, ser electo como nuevo presidente de la junta. Con este acuerdo, tanto Castillo Armas como Monzón alcanzaban sus objetivos (pp. 125-126). 

Por otro lado, el análisis de Ardón plantea algunos cuestionamientos importantes a la teoría. En este libro se observan instancias en las que los actores no buscaron maximizar su poder individual en detrimento de los otros miembros de la junta. Por ejemplo, según el autor, la junta revolucionaria del 44 se caracterizó por lograr «trabajar en armonía (…) entre sus miembros nunca hubo jerarquía alguna (…) no asumieron roles de presidencia y vocalías (…) hicieron una distribución acordada del poder y se respetaron sus respectivos espacios» (pp. 95-96). Además, también se plantea un caso insólito luego del asesinato de Carlos Castillo Armas. El designado como sucesor, Luis Arturo González López, no deseaba asumir el cargo como presidente; fue prácticamente obligado a hacerlo. Este actor, a diferencia de otros, no buscó aprovechar el vacío de poder, ni tampoco buscó permanecer en el mismo por mucho tiempo. Ambos ejemplos podrían rebatir el supuesto que todos los individuos en la política buscan maximizar el poder. Sin embargo, también se puede argumentar que los intereses de estos actores en el largo plazo eran otros y que hicieron un cálculo estratégico de la situación. En efecto, Arbenz, quien fue miembro de la junta revolucionaria, fue posteriormente el sucesor de Arévalo. 

Ambos ejemplos podrían rebatir el supuesto que todos los individuos en la política buscan maximizar el poder. Sin embargo, también se puede argumentar que los intereses de estos actores en el largo plazo eran otros y que hicieron un cálculo estratégico de la situación.

Así como estos, hay muchos más episodios en los que se puede aplicar o retar al public choice. En general, es importante anotar que la obra se caracteriza por contar con un amplio conjunto de fuentes primarias así como una exhaustiva revisión de fuentes secundarias. Como resultado, se presenta un libro ameno para la lectura del público en general, pero que a la vez, hace contribuciones importantes a la ciencia política guatemalteca. 

Referencias

  • Ardón, R. (2019). Triunviratos: la controversial historia de las juntas de gobierno desde la caída de Jorge Ubico hasta nuestros días. Guatemala: Editorial GrafíaETC.

AVISO IMPORTANTE: El análisis contenido en este artículo es obra exclusiva de su autor. Las aseveraciones realizadas no son necesariamente compartidas ni son la postura oficial de la UFM.

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Jonatán Lemus

Profesor de Política Comparada del Instituto de Estudios Políticos y Relaciones Internacionales de la UFM. Actualmente cursa el doctorado en la UFM.

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